ENTORNO

Olérdola tiene mucho que ofrecer al visitante. La singularidad de su resistente naturaleza que viste la dura roca calcárea con manchas verdes de Acebuches, Encinas y la sempiterna Coscoja, acompaña a los monumentos que se conservan desde el pasado como el conjunto histórico de Olérdola o la ermita de Viladellops, ambos situados a unos 2 km de la masía. Y a medida que transitamos el espacio, la cultura vitivinícola se nos manifiesta una y otra vez…